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El Síndrome de Ulises, también conocido como Síndrome del estrés crónico del emigrante, es de naturaleza psicológica y surge parejo a la problemática que estos sectores de la población sufrirían, al afincarse en el nuevo país de acogida y ser víctimas de los problemas de soledad, desarraigo, incomunicación o marginación, etc... Son síntomas de tipo depresivo (tristeza y llanto), pensamientos de muerte y obsesivos, ansiedad, irritabilidad con menores, problemas somáticos (cefaleas y fatigas) o síntomas confusionales (pérdida de memoria)...
Toma su nombre del héroe de la Odisea, que permaneció largos años lejos de su Itaca natal, durante y tras su participación en la guerra de Troya.
Se calcula que en España unas 800.000 personas lo sufrirían, en una mayor o menor medida, afectando fundamentalmente al colectivo de los "sin papeles", y es seguro que nuestras actuales circunstancias de crisis económica contribuyan a intensificar o agravar su padecimiento.
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