El post de hoy viene muy a cuento y coincide con la recién iniciada campaña de vacunación antigripal de este año, en nuestros Centros de Salud...
Paseando por la ciudad de Zamora, en su calle principal y más concretamente en la fachada del antiguo ayuntamiento, puede verse esta curiosa placa que recuerda la tragedia que supuso la gripe, aquella mal llamada Gripe Española que quitó la vida a unos 20 millones de personas a lo largo del duro invierno de 1918...
No en vano Zamora fue la capital de provincia más castigada de nuestro país durante aquella epidemia, hasta el punto de que en una ciudad que apenas alcanzaba a tener la escasez de 17.000 habitantes (en 1918), días hubo en los que llegaron a contar 200 muertos.... Los motivos?: según recientes estudios tan importante transmisión pudo deberse a las aglomeraciones masivas de fieles en iglesias, procesiones o en la Catedral, para pedir la protección divina...
Porque puestos a ser piadosos, nadie gana a Zamora: en su casco antiguo aún pueden verse 23 iglesias románicas (Ver), a cual más bella, de las 40 que llegó a tener durante la Edad Media... Se trata sin duda de la mayor concentración de Románico de Europa, en un casco urbano.
Las autoridades eclesiásticas tampoco ayudaron mucho con declaraciones como esta: "el mal podría ser consecuencia de nuestros pecados y la falta de gratitud, la venganza de la eterna justicia ha caído sobre nosotros", organizando los actos religiosos masivos a los que nos hemos referido...
Un ejemplo más de como la fe también tiene sus inconvenientes (ya habíamos hablado en su día del famoso Terremoto de Lisboa, en el que sucedió algo muy parecido... Acceder)
Durante aquél triste invierno el estamento asistencial, religiosos, médicos, etc... aquellos que estuvieron más cerca de los enfermos sufrieron, como es de imaginar, un particular número de bajas: se calcula que sólo en Zamora murieron 200 médicos...
NOTA: Ya habíamos escrito acerca de la Gripe de 1918... (Ver)
NOTA: Ya habíamos escrito acerca de la Gripe de 1918... (Ver)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Los comentarios son bienvenidos!